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Este blog analiza cómo la IA y la automatización están transformando el trabajo por cuenta propia en Europa. Muestra que, si bien la tecnología puede generar nuevas oportunidades para algunos, también corre el riesgo de empujar a otros —especialmente a los trabajadores con bajos salarios— hacia formas precarias de trabajo autónomo.
Ya sea que seas un abogado que trabaja en un bufete y estás pensando en abrir tu propia práctica, una persona de limpieza que navega entre horarios impredecibles y busca un empleo más estable, o un programador que sopesa la libertad del trabajo freelance frente a la estabilidad de un puesto en el sector tecnológico, tu elección entre trabajar por cuenta propia o para otra persona está influida por muchos factores. La investigación muestra que las preferencias personales y las condiciones económicas y sociales más amplias desempeñan un papel importante. Lo que resulta menos evidente es cómo la tecnología que utilizas en tu trabajo —como las herramientas de inteligencia artificial o la automatización de tareas— puede estar inclinando la balanza.
Esto es lo que exploramos en nuestro estudio.¹ Queríamos entender cómo la tecnología —especialmente la inteligencia artificial (IA) y la automatización— afecta las decisiones reales de las personas de pasar del empleo asalariado al trabajo por cuenta propia, y si ciertos grupos de trabajadores (según sus habilidades, ingresos o edad) se ven afectados de manera diferente. Analizamos las transiciones de los trabajadores entre empleo asalariado, trabajo por cuenta propia en solitario y trabajo por cuenta propia con empleados, en 31 países europeos.² Esto nos permitió observar cómo la exposición a diferentes tipos de tecnología influye en las trayectorias profesionales: si las personas permanecen empleadas, se vuelven autónomas o alternan entre ambas situaciones a medida que avanza el progreso tecnológico.
Al definir el trabajo por cuenta propia, distinguimos entre el trabajo por cuenta propia en solitario (trabajar de manera independiente, sin empleados) y el trabajo por cuenta propia con empleados (dirigir un negocio con personal contratado). En cuanto a la tecnología, analizamos dos tipos: la IA —una tecnología que a menudo complementa el trabajo, ayudando a las personas a hacer más y mejor su labor— y la automatización —una tecnología que tiende a reemplazar tareas, especialmente las repetitivas.
Descubrimos que las personas expuestas a la IA en sus trabajos tienen más probabilidades de pasar al trabajo por cuenta propia en solitario, pero también más probabilidades de regresar al empleo asalariado. Esto sugiere que la IA puede crear nuevas oportunidades para el trabajo independiente, especialmente para quienes cuentan con las habilidades y la flexibilidad necesarias para aprovecharlas. Pero también podría implicar que el trabajo autónomo en solitario no siempre es deseable, especialmente a largo plazo. Nuestro análisis muestra que estos riesgos son especialmente pronunciados para los trabajadores con baja cualificación y salarios reducidos.
Por el contrario, los trabajadores en ocupaciones donde la automatización desempeña un papel importante tienen menos probabilidades de convertirse en trabajadores autónomos. Parece que cuando la automatización limita los tipos de tareas que requieren intervención humana, también reduce las posibilidades de establecer un negocio viable en solitario en esos sectores.
Esto sugiere que la tecnología puede abrir nuevas puertas para los trabajadores altamente cualificados, pero para otros puede significar perder seguridad laboral y verse obligados a emprender en solitario, a menudo con poco apoyo. Muchos de estos trabajadores no se vuelven autónomos por elección, sino porque no encuentran un empleo decente y estable.
Esto desafía la idea de que la tecnología siempre empodera. Más bien, existe el riesgo de que la tecnología aumente la desigualdad en cuanto a quiénes se benefician de ella. Sin políticas inteligentes, corremos el riesgo de que la transformación digital deje atrás a demasiadas personas.
Nuestros hallazgos apuntan a varias áreas en las que se necesita acción política:
- Competencias e inclusión digital: Los trabajadores necesitan apoyo para adaptarse a las nuevas tecnologías. Esto requiere formación específica —especialmente para aquellos en empleos vulnerables o de baja cualificación— que les ayude a mantenerse empleables o a emprender negocios sostenibles.
- Protección social moderna: Muchos trabajadores autónomos quedan fuera de las redes tradicionales de protección social. Los sistemas de protección deben reflejar la realidad de la fuerza laboral actual, incluyendo el empleo no estándar y el trabajo por cuenta propia en solitario.
- Apoyo al trabajo decente: No basta con celebrar la flexibilidad o el espíritu emprendedor. Es necesario garantizar que el trabajo por cuenta propia —especialmente en solitario— sea una vía hacia un empleo decente y seguro, y no simplemente una opción cuando no hay otras alternativas disponibles.
El trabajo por cuenta propia suele considerarse un signo de innovación y flexibilidad. Y a veces lo es. Pero esa no es toda la historia. Los trabajadores altamente cualificados que están expuestos a la IA pueden elegir entre seguir empleados o convertirse en emprendedores. Otros —a menudo en empleos mal remunerados o rutinarios— pueden verse empujados al trabajo autónomo en solitario por la falta de buenas alternativas en el mercado laboral convencional.
Actuar para garantizar que las políticas apoyen las transiciones laborales de los trabajadores es importante no solo para ellos individualmente, sino también para la cohesión social y la sostenibilidad a largo plazo de los mercados laborales y los sistemas de bienestar.
Las investigaciones futuras deberían analizar si las tendencias que hemos identificado con respecto a la IA continúan o incluso se intensifican a medida que su adopción se expande en la economía y el mercado laboral. En este contexto, los análisis que examinan los efectos de las diferencias normativas entre países parecen especialmente importantes.
¹ Bachmann, R., M. Gonschor, A. Mitra, S. Milasi (2025), Technological progress and the dynamics of self-employment: Worker-level evidence for Europe. International Labour Review 164(2): 1-23.
² Nuestros análisis se basan en datos de las Estadísticas de la Unión Europea sobre ingresos y condiciones de vida (EU-SILC) para el período 2014-2019.