
© UNCTAD Photo | El Vicesecretario General, Pedro Manuel Moreno (en el centro de la pantalla), inauguró el 7 de julio en Ginebra la 9ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre Competencia y Protección del Consumidor.
El mundo se reúne en las Naciones Unidas, adoptando medidas audaces para proteger a los consumidores y promover una competencia justa en una economía cada vez más digital y globalizada.
Principales conclusiones:
- Nuevo impulso para promover la seguridad de los productos: Los principios de la ONU buscan cerrar las lagunas normativas a nivel mundial.
- Gran avance en la reparación transfronteriza: Nueva declaración y propuesta de plataforma para ofrecer soluciones justas a los consumidores de todo el mundo.
- Regulación de la inteligencia artificial: Llamamientos urgentes a un uso ético y a proteger a los consumidores de la manipulación.
- Cadenas de suministro de alimentos más justas y competitivas: Se necesitan políticas de competencia favorables a los pobres para acabar con el hambre y ofrecer oportunidades a las pequeñas empresas.
La 9ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre Competencia y Protección del Consumidor concluyó el 11 de julio con un claro llamamiento para salvaguardar unos mercados justos, abiertos y competitivos a medida que la transformación digital modifica profundamente el consumo, las cadenas de suministro y la economía mundial.
Organizada cada cinco años por ONU Comercio y Desarrollo (UNCTAD), la Conferencia es la reunión multilateral de más alto nivel del mundo sobre competencia y protección del consumidor.
Durante la semana pasada, más de 500 participantes ─ministros de gobierno, diplomáticos y líderes de la sociedad civil─ de más de 100 países se reunieron en Ginebra para abordar retos acuciantes y trazar un nuevo y audaz rumbo para el futuro.
Los debates han abarcado desde los productos inseguros y las estafas transfronterizas hasta la inteligencia artificial (IA) para los mercados de consumo y la mejora de la competencia en los mercados digitales.
La conferencia también marcó dos hitos: El 45 aniversario de la adopción del Conjunto de Principios y Normas de la ONU sobre Competencia y el 40 aniversario de la adopción de las Directrices de la ONU para la Protección del Consumidor.
El Vicesecretario General de ONU Comercio y Desarrollo, Pedro Manuel Moreno, elogió ambos documentos como «herramientas vivas, diseñadas para evolucionar y servir a las personas», y pidió que se redoblen los esfuerzos en todo el mundo.
“Hago un llamamiento a todos ustedes ─gobiernos, expertos y socios─ para que renueven su compromiso”, instó Moreno a los participantes.
“Juntos, podemos garantizar que los mercados no sólo sean eficientes, sino también justos. No sólo abiertos, sino inclusivos”.
Momento decisivo para la seguridad de los productos de consumo
En un mundo basado en mercados interconectados y cadenas de suministro de rápida evolución, los productos inseguros en cualquier lugar pueden suponer una amenaza para los consumidores en todas partes. Sin embargo, resulta alarmante que el 44% de los Estados miembros de la ONU carezcan aún de marcos jurídicos sobre la seguridad de los productos.
Por ello, los delegados han decidido respaldar un proyecto de resolución que propone los primeros Principios de la ONU para la Seguridad de los Productos de Consumo, impulsados por la larga labor de ONU Comercio y Desarrollo y la búsqueda de consenso en el marco de su Grupo Intergubernamental de Expertos en Derecho y Política de Protección del Consumidor.
La resolución pasará a la Asamblea General de la ONU para su adopción formal, con el potencial de definir normas mundiales para productos más seguros más allá de las fronteras.
Gran avance en la reparación transfronteriza
Un estudio de ONU Comercio y Desarrollo muestra que en 2022 el comercio electrónico mundial alcanzó los 27 billones de dólares. Las transacciones transnacionales solo representaron menos de una cuarta parte del total mundial, en parte debido a la escasa confianza de los consumidores en los mecanismos actualmente disponibles para resolver litigios más allá de las fronteras.
La conferencia de esta semana marca la diferencia con una nueva Declaración sobre resolución de litigios transfronterizos y reparación, presentada por la República Dominicana y adoptada por consenso.
La declaración refleja un compromiso mundial unificado para garantizar que los consumidores, estén donde estén, tengan acceso a recursos justos y oportunos cuando sea necesario.
Para hacer realidad esta visión, ONU Comercio y Desarrollo presentó una propuesta para una plataforma mundial de resolución de disputas en línea de código abierto.
Diseñada para ser interoperable, escalable y fácil de usar para los consumidores, esta plataforma pretende agilizar la tramitación de reclamaciones transfronterizas, al tiempo que ayuda a los países a crear la capacidad jurídica e institucional que tanto necesitan.
Promover los derechos de los consumidores en la era de la IA
El rápido auge de la IA también ocupó un lugar destacado, con una sesión especial en la que se subrayó la necesidad de cooperación mundial para gobernar y aprovechar esta tecnología de vanguardia en beneficio de los consumidores.
Si se utiliza correctamente, la IA puede hacer que los sistemas de protección del consumidor sean más ágiles y reactivos.
A este respecto, en la conferencia se expusieron casos de éxito de organismos de protección del consumidor que ya utilizan herramientas de IA para detectar prácticas comerciales perjudiciales, tramitar denuncias y agilizar las medidas de ejecución.
Mercados alimentarios competitivos para todos
En cuanto a las cadenas de valor alimentarias, el análisis de ONU Comercio y Desarrollo ha señalado que las cuatro principales empresas controlan hasta el 70% del mercado agroquímico y más del 85% del comercio mundial de cereales.
Esta concentración otorga a un puñado de empresas multinacionales un inmenso poder de negociación, a menudo a expensas de los agricultores, los trabajadores del sector alimentario y los consumidores.
Para invertir esta tendencia, la conferencia reclamó políticas de competencia “en favor de los pobres” que mantengan los mercados abiertos, justos y conducentes a fomentar soluciones y oportunidades sostenibles para los pequeños agricultores.
También se destacó la importancia del consumo y la producción sostenibles en el contexto de la economía circular, incluida la necesidad de contar con sistemas de información al consumidor y marcos jurídicos más sólidos para apoyar las transiciones ecológicas y justas en los países en desarrollo.
La cooperación mundial es más necesaria que nunca, ya que es mucho lo que está en juego
La conferencia concluyó con un renovado sentido de propósito compartido de que los mercados abiertos, justos e inclusivos no son un hecho. Por el contrario, requieren esfuerzos constantes, tanto a nivel individual por parte de los países como de forma colectiva por parte de la comunidad internacional.
Esto implica pasar del diagnóstico de los problemas al despliegue de soluciones, garantizando que los consumidores tengan poder y estén protegidos en todas partes, y que los mercados funcionen no sólo para unos pocos poderosos, sino para todos.
Con este fin, la conferencia ayudó a reforzar las plataformas regionales para una aplicación más sólida y coordinada de las normas de competencia y protección del consumidor, destacando iniciativas modelo en África y América Latina para investigaciones conjuntas, intercambio de datos y formación institucional.
ONU Comercio y Desarrollo también mantiene su compromiso de mejorar la colaboración internacional en materia de competencia a través de las Políticas y Procedimientos Rectores de la cooperación para la competencia, que facilitan la aplicación transfronteriza y fomentan la confianza mutua entre las autoridades nacionales.